JOAN RUBIÓ – El arquitecto modernista que transformó la masía de Sant Pere de Clarà
¿QUIÉN FUE JOAN RUBIÓ?
Joan Rubió i Bellver fue un arquitecto modernista catalán, discípulo de Antoni Gaudí, activo durante la primera mitad del siglo XX. Nacido en 1879 en Barcelona, Rubió estudió en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona y empezó su carrera profesional en 1901. Durante su carrera, Rubió desarrolló un estilo arquitectónico propio, caracterizado por la combinación de elementos modernistas con influencias tradicionales catalanas.
Una de las obras más conocidas de Rubió es la Casa dels Dragons, construida en 1901. En esta casa, Rubió utilizó elementos modernistas como las baldosas cerámicas y las formas curvas, pero también incorporó elementos tradicionales como las tejas rojas y las ventanas con persianas. El resultado es un edificio llamativo y único, que se ha convertido en uno de los ejemplos más representativos de la arquitectura modernista en Barcelona.
Otra de las obras destacadas de Rubió es la Casa de las Pinchas, construida en 1905. En esta casa, Rubió utilizó elementos modernistas como las formas curvas y las ventanas con vidrieras, pero también incorporó elementos tradicionales como las baldosas cerámicas. El resultado es un edificio que se ha convertido en uno de los ejemplos más representativos de la arquitectura modernista en Barcelona.
SANT PERE DE CLARÀ EJEMPLO DE LA ARQUITECTURA MODERNISTA RURAL CATALANA
Una de las obras de reforma más importantes de Joan Rubió es la Masía y la Capilla de San Pedro de Clarà, considerada uno de los grandes ejemplos de la arquitectura modernista rural en Cataluña. La Masía, ubicada en el municipio de Argentona, en el Maresme se caracteriza por su estilo único en la combinación de elementos modernistas y tradicionales.
El proyecto fue encargado por el industrial Jaume Figueras en 1920, para uso residencial. Las características tradicionales del edificio y su pasado gótico permitieron que Rubió sueltas a su gran creatividad en la combinación de los elementos decorativos y arquitectónicos.
Así pues, en la Masía de Sant Pere de Clarà podemos ver el trabajo con las baldosas cerámicas, las vidrieras, la piedra, el ladrillo a la vista, las molduras y los forjados… etc… Rubió desplegó allí todos los cánones del modernismo, creando un estilo único y señorial en la fachada y ofreciendo grandes espacios llenos de luz y al mismo tiempo muy acogedores en los interiores, combinando funcionalidad y estética.
La masía es un edificio de tres plantas, con su correspondiente nave central y dos naves laterales. La fachada principal destaca por el balcón central, los dos ventanales de estilo gótico y un gran arco de medio punto que corona el balcón, justo debajo del tejado. Todo esto le otorga un gran aspecto monumental a la fachada.
El exterior de la masía cuenta también con ornamentos y detalles decorativos, como los forjados, que le dan un toque distintivo y combinan con los antiguos elementos góticos preservados de la fachada original. Rubió supo combinar a la perfección los vestigios del centenario edificio gótico con las nuevas tendencias del modernismo.
En la planta superior, el gran ventanal, con arco de medio punto, se encuentra rodeado de dos ventanas más pequeñas, que permiten la entrada de luz natural en el interior del salón del edificio.
Dentro de la masía, Rubió utilizó una gran cantidad de elementos decorativos, como las baldosas cerámicas, la madera y el forjado. El uso de ellos es evidente en todas las habitaciones, desde el vestíbulo de entrada hasta el comedor, la cocina o los dormitorios. Además, Rubió también incorporó gran cantidad de materiales tradicionales, como las vigas de madera a la vista o fuentes de cerámica y piedra. Rubió supo mantener y jugar con detalles de la arquitectura popular como las veladoras en los ventanales o una gran chimenea para crear un ambiente rural, cálido y acogedor.
En resumen, la Masía de Sant Pere de Clarà, en el Maresme, es una de las obras más importantes de Joan Rubió y Bellver, un arquitecto modernista catalán, conocido por su estilo personal y gran creatividad en el uso de los elementos decorativos. La Masía está considerada uno de los mejores ejemplos de la arquitectura modernista rural en Cataluña.